Llevo tiempo intentando conseguir hacer algo con mis leves habilidades costureras y parece ser que el resultado no está del todo mal. La máquina que me ayuda en el proceso es una SINGER antigua heredada y estoy sorprendida de que con unas gotas de aceite vaya suave como la seda.
Para la semana que viene tengo que inventarme algo, porque ya estoy enganchada y no puedo perder el impulso. A ver qué se me ocurre.
Abrazos urticantes.
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